El budismo es una tradición de más de 2600 años que se origina en La India. Su fundador, Siddharta Gautama al que se llamaría el Buda Sakyamuni, nos enseña, por propia experiencia, que todos los seres tenemos un potencial de claridad y armonía que podemos desarrollar hasta la plenitud.

El budismo explica la realidad de una forma completa y profunda, dando respuesta clara y convincente, desde un punto de vista no dogmático a las preguntas existenciales . La práctica del budismo se basa en la interiorización personal de las enseñanzas a través de un proceso de estudio, reflexión y meditación. En este sentido, podemos decir que el budismo es una ciencia de la mente que ofrece técnicas de crecimiento psicológico y espiritual, sustentada en la experiencia de todo un linaje de sucesivos practicantes que han constatado sus efectos.

Cuanto más familiarizados estemos con la naturaleza real de la existencia, mayor capacidad tendremos de orientar nuestra vida para poner las auténticas causas de felicidad y bienestar para nosotros y para todos los seres.

El budismo es un camino de crecimiento interior, una filosofía integral de vida, que nos ayuda a redescubrir nuestro potencial para experimentar la armonía y plenitud que nos corresponde por naturaleza. La tradición mahayana o universal del budismo, a la cual pertenecemos, considera que todos los seres compartimos esa misma naturaleza y potencial. Su aspiración es contribuir a que todos los seres, sin distinción, desarrollen este potencial y alcancen la plenitud.

Dice el mismo Buda:
“¡Escuchad monjes y sabios!
Como el orfebre analiza la pureza el oro,
cortándolo, raspándolo y fundiéndolo,
así debéis analizar mis palabras,
no las aceptéis únicamente por respeto hacia mí.”
“Nunca cometer acción dañina alguna,
acumular una fortuna en méritos positivos,
dominar por completo la propia mente.
Esa es la enseñanza del Buda”